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Letras
Rocío Prieto Valdivia*
Es justo en estas horas del desvelo cuando mi palabra es un alto navío en la alta mar que se precipita.
Siento el viento que corre, reseca mi garganta; no hay humedad para saciar esta sed que surge sobre tus muslos.
Aroma de mar se impregna en la comisura de mi boca.
Sé que tu nombre lo grabé en las arterias de las flores del manto marino,
y las anémonas de mis adentros se queman con las blancas gotas y tus lágrimas en la piel que jamás fue tuya.
Esa anguila eléctrica de tu beso causa estragos en el calamar de mi entrepierna que salta al recordar dónde quedó el coral de tu saliva como espuma de mar abierta.
Océano nocturno,
gotas de fósforo brillan en la orilla de la playa donde ya no estás.
*Del Poemario Lúmina.
