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“Sombras nada más”, de César Silva Márquez, es una obra de 352 páginas lanzada vía Editorial Harper-Collins, cuya premisa señala: “El mundo es una locura y yo imaginando películas incendiarias.” Así comienza una historia que se desarrolla en la icónica Ciudad Juárez, entre percusiones, mafiosos, policías y periodistas, siendo el centro de todo la obsesión de Luis Kuriaki por resolver el asesinato de su novia.
Luis Kuriaki sufre el acoso de sus pesadillas nocturnas, derivadas del asesinato de su hermosa novia Verónica Mancera, por lo que se obsesiona con resolver el asesinato de la joven. Conforme la trama se desenvuelve, todas las historias se van entrelazando en una voraz espiral de delirios y persecuciones cuyo epicentro es la icónica Ciudad Juárez. La velocidad de las emociones y la decadencia moral de una sociedad, espoleada por los millones de dólares, con frecuencia sucios, que nutren, pero también corrompen esta ciudad, van borrando la división entre los buenos y los malos.
Estamos ante un luminoso retrato narrativo sobre la decadencia y la esperanza, en toda la extensión de la palabra. Mafiosos, policías y periodistas son los protagonistas de un espectáculo donde las mujeres suelen llevar la peor parte. En medio de la catástrofe se asoma, sin embargo, el fulgor de una quimera y la posibilidad de redención y belleza a la que todos los seres humanos aspiramos.
“Retomo a Luis Kuriaka y Luis Pastrana porque alguna vez me dijo Elder Mendoza que le gustaban los dos personajes, señalándome que hacían buena pareja; también por la manera en la que esta pareja dispareja pudiera funcionar: Kuriaki, el periodista, debía ser más joven, mientras que el policía, Julio Pastrana, era mayor, con todo el colmillo, y terminaba apoyando al primero,” señaló el autor.
Al explicar la psicología de los personajes el autor compartió: “Creo que todos como personas estamos heridos de alguna manera, conforme vamos viviendo la vida nos vamos encontrando con los dolores reales de la vida, Luis Kuriaki tiene esas pérdidas como cualquier persona común, igual Pastrana pierde seres queridos, son personajes que se van construyendo con base a estas tragedias.”
Personajes secundarios, a través de acontecimientos diarios de la ciudad, aportan elementos dramáticos. César dice que en Ciudad Juárez pasa de todo: varias tragedias sucedieron tanto allí como en sitios como Veracruz o la misma CDMX, historias que de alguna manera están inspiradas en Stephen King, en lo perturbador que pueden llegar a ser.
Sobre este libro, el prestigioso actor Joaquín Cosío dijo: “‘Sombras nada más’ la leí como se debe beber un buen mezcal: despacio, pero con buen trote. Una novela imán, que engancha desde el principio, te envuelve entre esas vidas de los que habitan una Ciudad Juárez inimaginable. El Ruiseñor de América, Julio Jaramillo, deambula en la frontera como lo hacen también el periodista Luis Kuriaki, el vengador Pastrana. Un mago que le hace trucos a los narcos y la única Rossana, mujer de mil rostros, como el deseo mismo. Sin duda la mejor novela de César Silva Márquez.”
La novela toca la muerte de los tres grandes: Pedro Infante, Jorge Negrete y Javier Solís. El autor comenta que para poder escribir mentiras debes saber las verdades, reconociendo que Javier Solís es uno de sus cantantes preferidos, por lo que investigó sobre su vida, quiénes fueron sus esposas; también de Pedro y Jorge, ya que en los tres casos existen teorías conspiratorias que valía la pena rescatar, escribiendo historias que se sintieran orgánicas.
RICARDO PAT
