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Saltamontes rosa (Orophus tessellatus)

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Insectos

Los saltamontes son capaces de cambiar el color de su cuerpo al color del suelo sobre el que viven para ser menos visibles a posibles depredadores.

Es común observar saltamontes verdes, marrones e incluso blancos, pero existen los saltamontes de color rosa, cualidad que los convierten en animales exóticos muy poco conocidos alrededor del mundo. El saltamontes rosa es de este color en función de un gen recesivo que, a diferencia de otros saltamontes, ellos sí desarrollan. Aunque existe un caso aislado en cada 50 mil, se cree que la supervivencia de este tipo de saltamontes se debe a este vistoso color que deja de ser atractivo a los ojos de los depredadores.

El saltamontes rosado es similar a un saltamontes común: tiene 3 pares de patas, 1 par de antenas y 2 pares de alas para saltar más lejos. Son insectos invertebrados que pertenecen al conjunto de la especie de los ortópteros (Orthoptera) y al filo de los Artrópodos. Los pocos ejemplares que existen de esta especie han sido vistos en los bosques del condado de Devon, al sudoeste de la vieja Inglaterra, y en Portugal. Esta coloración en los saltamontes fue descrita por primera vez en 1887. Mide entre 5 y 7 centímetros de largo. El saltamontes rosado se reproduce de manera natural solo una vez entre cada 500 individuos. La especie ha conseguido reproducirse en cautiverio en el insectario de Nueva Orleans.

Esta especie de saltamontes se puede encontrar en suelos arcillosos o arenosos, siempre con escasa vegetación. Los adultos viven de 6 a 7 meses y algunos pueden invernar, para dar origen a la siguiente generación; su desarrollo ocurre en primavera. Algunos se alimentan principalmente de césped o juncos, mientras que otros prefieren las plantas latifoliadas. Otros saltamontes restringen su alimentación a plantas sin mucho valor e incluso algunos se alimentan de especies de malezas.

El color de los saltamontes suele ser muy similar al suelo donde se encuentra, por ejemplo, rojizos en suelos rojizos, o gris claro en zonas de arcilla clara. Esta buena combinación entre el color de los animales y su ambiente se puede explicar por tres vías. Una de las más conocidas es la selección natural, que favorece a los individuos mejor camuflados. La segunda sería porque los individuos que no combinan bien con un tipo de ambiente se desplazan hacía otros donde su camuflaje es mejor. Y la tercera sería debido a que los saltamontes son capaces de cambiar su propio color hacia el color del suelo sobre cual viven para mejorar su camuflaje. Los saltamontes utilizan esta tercera estrategia para evitar la depredación.

Los cambios de color en los saltamontes son debidos a cambios en la cantidad y calidad de los pigmentos incorporados en la piel. Son cambios lentos (desde varios días hasta semanas) comparados con los rápidos cambios de pulpos o camaleones, por ejemplo. Además, son cambios costosos e irreversibles. Por tanto, es de esperar que controlar cuáles y cuántos pigmentos producir sea de gran importancia para los saltamontes.

A pesar de su capacidad de cambiar el color, también se han encontrado indicios de que una parte de la variación en color entre saltamontes está determinada genéticamente.

Por su parte, el saltamontes rosa no está en peligro, ya que se han podido reproducir fácilmente en cautiverio. Cabe aclarar que es más probable verlos en condiciones no naturales, pues dentro de la naturaleza son muy escasos. El saltamontes rosado se ha visto favorecido por la naturaleza al recibir esta pigmentación tan peculiar, que asemeja su aspecto al de algunas flores.

Dra. Carmen Báez Ruiz

drabaez1@hotmail.es

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