Libros
Revival, de Stephen King
Hace muchos años que no me topaba con un libro de Stephen King como Revival, uno que me transportó a aquellos días en los que, sin mayores preocupaciones que asistir a mis clases en la preparatoria y luego en los inicios de mi carrera, era necesario continuar volteando páginas del libro que estuviera leyendo para encontrar lo que seguía, continuar emocionalmente tomado de la mano del autor hasta el desenlace, y entonces, al finalizar, decir: “¡Wow! ¡Qué buena historia!”
En ocasiones anteriores he mencionado que soy un ávido seguidor de Stephen King, que he leído casi todo lo que ha publicado (lo que me hace falta está en vías de ser leído) y que, por lo tanto, he podido apreciar la manera casi mágica como fluyen sus palabras. Como todos los escritores, todos aspiramos a llegar a ese nirvana en el cual la historia nos toma de la mano y nos hace escribirla, cuando el relato es tan fluido y tan libre de complicaciones que pudiéramos sentarnos a escribir por días y días, sin atender más que al comando que la trama adquiere sobre nosotros.
¿Cuál es la diferencia entre este libro y los que he estado reseñando en Diario del Sureste, aquellos de los que ya hablamos en la trilogía de Bill Hodges: Mr. Mercedes y Finders Keepers? El tiempo transcurrido en cada historia es la respuesta y, por lo tanto, la extensión. Las historias de Bill Hodges se circunscriben a episodios específicos en el tiempo, mientras que Revival nos cuenta, a través de las palabras del protagonista Jamie Morton, la historia de una persona: desde su niñez hasta el episodio clave que nos desea presentar. Así pues, la historia se desarrolla desde diferentes etapas de la vida, y he ahí donde King nos llena de aquello que hace grandiosa una historia: los detalles. En este libro, causa pesar darse cuenta de que estamos por llegar al final, sobre todo cuando hemos disfrutado cada pasaje y cada etapa del recorrido.
Jamie nos cuenta su historia desde que es un niño y una sombra le bloquea la luz del sol mientras juega con sus soldaditos de plástico; esa sombra es la del Reverendo Charles Jacobs quien, junto con su bella esposa y su hijo, se acaban de mudar a la población donde vive Jaime con sus hermanos y sus padres. A lo largo de los siguientes cincuenta años, cuya travesía leemos en el libro, el Reverendo y Jaime comparten fugazmente parte de sus vidas, cada encuentro representando un evento significativo en la vida de cada uno de ellos.
King se encarga de intercalar las vicisitudes en la vida del músico Jamie Morton, con las del Reverendo Jacobs, que se ha convertido en un imán para las multitudes que desean una cura milagrosa en una de sus famosas “Revival”, que no es más que la palabra en inglés con la que se denominan las carpas en las cuales se dan este tipo de eventos mágico-místico-espirituales. Si se preguntan si el libro en algún momento alude a lo sobrenatural, la respuesta es afirmativa: El Reverendo Jacobs es un ferviente admirador de Tesla y jura y perjura que la electricidad es la única fuerza capaz de curar; la labor de su vida es demostrarlo, y para ello requiere de Jamie.
Además, y se nota en la prosa, King introduce a la historia muchos episodios que le son muy conocidos, como las adicciones, como la música, como las relaciones familiares y, al hacerlo, nos conmueve y gentilmente nos hace preocuparnos por el protagonista, porque al mismo tiempo nos preocupamos por él. Adicionalmente, en su narrativa King agrega elementos muy actuales en nuestra sociedad, referencias y actitudes sociales, con lo que nos sentimos dentro de una historia reciente, en un caleidoscopio cuyas imágenes, al modificarse y colocarse de cierta manera, nos muestran diferentes facetas del horror que vivimos en nuestras vidas y que hemos dejado de apreciar como anormales. Me refiero a los feminicidios, a los bribones, al terror subyacente a lo desconocido.
Con una historia y un final que semeja mucho a las historias que nos contaba Howard Phillips Lovecraft, otro de mis autores favoritos, me parece que con Revival Stephen King pretendió realizar un tipo de homenaje al gran escritor de Providence, Rhode Island, en los Estados Unidos, que resulta estar muy cerca de donde vive King: Bangor, Maine.
Lovecraft + King = placer garantizado para el lector.
Revival es un perfecto ejemplo de la maestría y habilidad de uno de los más grandes escritores de nuestros tiempos, un gran observador y cronista, uno que transita fácilmente de lo cotidiano a lo sobrenatural.
Gerardo Saviola