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Atisbando El Arte
Piel Adentro
Como acuse de recibo al poemario de la compañera del Taller Literario “Cartago” – la escritora Ruth Parada Zenil –, en varias ocasiones anteriores he tenido en mis manos los trabajos originales de esta compañera de letras sin que la amistad que me dispensa pudiera falsear mi apreciación de su labor en su obra “PIEL ADENTRO”, que secciona en tres partes sus vivencias poéticas, para dar paso a una musa hecha a través del arduo trabajo literario en talleres poéticos y de literatura en general.
He encontrado un libro de poesía ágil y coloquial que pone la sazón al recorrer el camino abrupto y sinuoso de una pluma creadora de versos hacia su verdad cotidiana.
Leer a Ruth es encontrar un remanso de lectura amena, descubrir un espíritu lleno de inquietudes que pasan como cinta cinematográfica por su mente. Su pluma las plasma con rimas, asonancias, figuras retóricas y bellos mensajes que nutren el espíritu.
Es una obra sencilla, espontánea, limpia, sin hinchazones de erudición, ni objetivos de rígido magisterio. No una historia que enseña, sino una poesía que sugiere, porque quizá sea más eficaz ésta que aquella.
Aquí se conjugan anécdotas, episodios de contenido personal, vivencias. En cada una de ellas encontramos un soplo de vida, un hálito de humanidad, una parte de su vida grabada en acontecimientos ciertos que nos llevan por el camino trascendental, que nos hacen recorrer el anecdotario personal, familiar y eclesiástico.
Leo en silencio sus versos y me imagino que su agradable voz me los susurra.
Ella ama a los niños, la vida, los árboles, la flor, el mundo entero; ella pide la paz para que todo esto perdure, para que los niños corran por verdes prados, senderos dorados, con frutales aromáticos, con colores hermosos y dulce sabor, en un ruego plasmado en versos amables y sonoros.
Este libro es un bello resumen de su producción poética.
En muchas ocasiones de la revisión literaria – donde se cambiaban posiciones de versos, se revisaban asonancias o rimas, o se sugería un título que no vendiera la poesía – se escribía sobre los originales para aumentar la calidad literaria de los mismos, e hice una recopilación de esta escritora durante su paso por el Taller Literario “Cartago”, en el cual abrevamos con otros escritores y amantes de la poesía bajo la supervisión de la poeta y crítica literaria María Ella Gómez Rivero cuyas indicaciones fueron magistrales para avanzar en el campo poético. No estuvo a mi alcance reunir todos los trabajos tallereados de los que participamos en él, pero pude conservar y rescatar algunos de los papeles arrugados – entre ellos algunas muestras de las poetas Ruth Parada y Addy Victoria Campos y del que escribe – para hacer un poemario individual y temporal de los años 2011 y 2012, como testimonio de nuestro paso por “Cartago”.
Esta nueva recopilación es una constancia del movimiento poético en la ciudad de Mérida, Yucatán, México en el nacimiento del siglo XXI. Representa el despertar de nuestro tiempo, representando al Hombre – genérico –, a la ciudad, y al lenguaje de nuestra ciudad y sociedad. Este despertar se dio con una manera plena y con distintas expresiones en esa primera fase de un modernismo poético, que no tiene que ver con ese modernismo ampuloso y formalista de la lengua española.
Su depurada imagen y su encuentro con el lenguaje cotidiano, la pasión por la modernidad real, vital, por el orbe infinito en Ruth fue el encontrarse a sí misma, haciendo de su obra un momento esencial de la poética adquirida en “Cartago”.
Ruth Parada continúa en la brega de la actualización literaria. Su afán por las letras es arduo y sostenido: es en la actualidad miembro del taller “Carlos Moreno Medina”, bajo la dirección de la escritora Pilar Acevedo Brito, y trabaja en en un nuevo libro – que ya le lleva dos años – sobre el análisis literario y biográfico de Sor Juana Inés de la Cruz.
ALFONSO HIRAM GARCÍA ACOSTA