Acuse de Recibo
ALFONSO HIRAM GARCÍA ACOSTA
Hace un par de días, a las puertas de mi casa recibí la visita del investigador histórico, escritor y contador público Luis Orlando Briceño Alonzo con la primicia de su libro: “Personajes de la Historia que hicieron Historia”, siendo un honor que el primer ejemplar estuviera dedicado a mi persona. Nuevamente, gracias.
Se trata de un volumen altamente interesante en su variado contenido histórico, salpicado con ilustraciones a color y blanco y negro, según la época, de elegante formato, portada y contraportada en papel satinado tamaño carta, y subdividido en 43 segmentos que conforman el contenido, como dice su título.
En ocasiones anteriores he tenido en mis manos algunos de los trabajos del maestro y contador público Luis Orlando Briceño Alonzo. Desdeño que la amistad que me dispensa podría ser motivo para falsear mi apreciación de su labor como analista y escudriñador de algunas de las facetas de la historia vernácula y nacional. Ahora nos muestra en “Personajes de la Historia que hicieron Historia” acontecimientos poco conocidos u olvidados, acercándonos a una disección histórica de facetas escondidas de los personajes que dejaron huella en el acontecer de la época, en un sencillo trabajo de redacción ágil y coloquial, sin perder el origen histórico, poniendo con su pluma creadora la sazón literaria al recorrer el camino abrupto y sinuoso de una investigación acuciosa.
Leer a Luis Orlando es encontrar un remanso de lectura histórica amena, que nutre el espíritu y actualiza a los personajes que hicieron la Historia. Es una obra de investigación, espontánea, limpia, ilustrada con imágenes de época, sin hinchazones de erudición, ni objetivos de rígido magisterio histórico. El lector encontrará no una Historia que enseña, sino el análisis que sugiere, porque quizás sea más eficaz este, que aquella.
Aquí se conjugan anécdotas, episodios de contenido personal, vivencias de los personajes que relaciona; en cada uno encontramos un soplo de vida, un hálito de humanidad, de concepto de unidad nacional, una parte de vida, narrada y grabada en acontecimientos ciertos, que nos muestran el camino trascendental de la raíz histórica pues, quien no conoce la Historia, desconoce el Futuro.
Su trabajo de investigación queda de manifiesto en cada uno de los capítulos de que consta: el trabajo político de los Sanjuanistas, con Lorenzo de Zavala, en la iglesia de San Juan con el padre Velázquez y el padre de Don Andrés Quintana Roo; las anécdotas de Doña Leona Vicario; Don Manuel Crescencio Rejón, creador del Juicio de Amparo; Juan Miguel Castro, y su presencia en la localización de Puerto Progreso y el trazo de su carretera y ferrocarril; el movimiento de los Ferrocarriles de Yucatán; Fray Juan de Mérida y los conventos construidos en su época; el mejor gobernador de Yucatán, Lucas de Gálvez; los yaquis deportados a Yucatán; datos de guerra civil Mérida-Campeche; Diego de Landa y el acto de fe en Maní, así como otros tratados con la seriedad de investigación del escritor e investigador histórico Luis Orlando Briceño Alonzo.
Su magnífico contenido histórico e ilustrativo hace de este libro un repaso al calendario pasado. Leyendo en silencio sus momentos y anecdotarios, me es fácil pensar que una agradable voz me los susurra. Gracias.
