Permanencia
Quiero tu polen de dulzura
incendiando mis silencios
y aquella querida sonrisa
que pasó furtiva.
Quiero un privado crepúsculo
informando de tu risa,
aquellas manos entreabiertas
desgranando tiempos.
Quiero la acariciada permanencia
donde regresa tu fuego,
y aquella caricia electrizada
perfumada de asombros.
Alfonso Hiram García Acosta