Cine
Los Parecidos, de Isaac Ezban
Los Parecidos es el segundo largometraje en la carrera como director del mexicano Isaac Ezban, siendo El Incidente el primero, ambos filmes bordeando entre lo fantástico, el horror, y también como homenaje a películas con temáticas similares. Ezban lleva poco menos de diez años en la silla de director, principalmente filmando cortometrajes, y fue hasta 2014 que logró conseguir los apoyos para lanzarse al ruedo con estas películas que rápidamente lo han colocado como un novel talento mexicano en la cinematografía. Paralelamente, fundó desde 2007 la compañía productora Yellow Films que recientemente se subdividió, recayendo en Ezban la responsabilidad por la productora Red Elephant.
En nuestra historia contemporánea, el 2 de octubre de 1968 ocupa un lugar especial – uno que Luis González de Alba, dirigente estudiantil de aquellos días, siempre consideró se magnificó, obliterando lo verdaderamente significativo del movimiento estudiantil de esos años – en la psique de todos nosotros, que hemos escuchado repetirse año tras año. Pues esa es la fecha en la que se desarrolla la historia de Los Parecidos que vemos desarrollarse en la pantalla y se alude en varios momentos a Tlatelolco.
No deja de ser plausible el cuidado que tomó todo el equipo en recrear desde el vestuario, los escenarios – una estación de camiones –, la atmósfera social, los radios portátiles, las revistas y hasta la máquina expendedora de refrescos de aquellos días. Además, hay que mencionarlo, el filme va adquiriendo tonalidades y colores conforme progresa, pasando de un blanco y negro a un filme a colores – aunque en tonos muy apagados – con lo que contribuye a crear una atmósfera anormal. El director, muy a la usanza de los episodios de la serie de TV “Dimensión Desconocida”, inicia el filme narrando en off, llevándonos a una semi desierta estación de camiones, bajo un torrencial aguacero.
El resto de la historia no lo revelaré porque eso sería demeritar la oportunidad de que ustedes resulten sorprendidos por lo que sucede en la terminal camionera, y por el porqué de lo que sucede. Baste decir que es muy satisfactorio que este filme nos mantenga en tensión sin necesidad de caer en violencia gratuita, y sin necesidad de usar cubetas de sangre o abruptos cambios en el volumen de la música de fondo. Tal vez el único elemento que resulta a veces un poco forzado es el diálogo de uno de los personajes, un estudiante de medicina, cuyas líneas francamente no las diría una persona normal. Claro está que eso de “normal” es algo que no está presente en el filme, lo cual le da su encanto particular.
Los actores desempeñan muy bien sus roles, y hacen que la fantástica historia fluya con el adecuado ritmo de extrañeza y alienación que requiere, lo que no debería sorprendernos puesto que muchos son renombradas figuras de la actuación, muchos de ellos surgidos de la película Amores Perros: Fernando Becerril, Humberto Busto, Cassandra Ciangherotti, Gustavo Sánchez Parra, Carmen Beato, y Santiago Torres en los roles principales, y otros que se complementan muy bien con este reparto.
Definitivamente, Isaac Ezban tiene madera para llegar lejos y su cine viene a llenar una muy original vertiente que no se había tocado en el nuevo movimiento del cine mexicano que experimentamos, y aplaudimos, desde hace algunos años hacia aquí. Ezban se siente cómodo en el género fantástico, recordándonos un poco cómo fue el inicio del gran director jalisciense Guillermo del Toro, y ojalá siga ofreciéndonos más trabajos como este.
Los Parecidos es una muy refrescante y lluviosa opción de cine que no defrauda. Por favor, no cuente la trama, para mantener intrigados a los que deseen ir a sorprenderse con esta gratificante propuesta de cine fantástico.
Gerardo Saviola