Letras
José Juan Cervera
“El número lo gobierna todo” dicen los entendidos en las combinaciones de la vida. El caos es una suma de fuerzas desordenadas que escinden el universo y portan signos plagados de fiebre y melancolía.
Un número para cada aliento fugitivo y otro para cada aspiración vital.
Para dar seguridad a su parentela ampliada, los números alojan familias extensas en tablas de multiplicar.
En su vuelo inesperado tejen una suma de incógnitas hasta cubrir espacios muertos.
La bienaventuranza transporta signos que ignoran sus orígenes numéricos.
Tras adiciones ambiguas y cálculos de engañosa firmeza, el número final arroja balances de frágil equilibrio.
Escucha el sonido armonioso de los números que se quiebran.
Prendarse de un número equivale a negar los efectos de la suma de sus dones.
La exactitud es quimera que pinta colores en el alma del desafío.
Cuando desborde los confines de su gabinete de hielo, el cálculo cortará las alas del ave incandescente, y minará el fruto de los arcones de la tierra.