Generación Dorada
Recuerdo perfectamente que incursioné en la Televisión de manera fortuita. Mi tío Alberto Lugo me invitó a visitar el Canal 13, donde él trabajaba como operador en el control maestro. Ese día estaba en las instalaciones del canal y a la hora de transmitir el noticiero no había llegado ninguno de los camarógrafos; no había personal para ese evento. Entonces le dije a mi tío que me permitiera apoyarles y me dieran chance de operar las dos cámaras, dudando que esto podría ser factible ya que nunca había estado frente a una cámara de Tv y mucho menos en un estudio. Sin embargo, dada la osadía y el apremio, me dieron la oportunidad.
Sin haberlas nunca operado, mi tío Lugo en todo momento me apoyó, indicándome el funcionamiento de las dos cámaras, la fija y la móvil, dándome oportunas indicaciones, por lo que afortunadamente todo salió bien; hasta me felicitaron. A partir de ese momento empecé a participar en programas que se producían en el canal. De los más gratos recuerdos que guardo están el Tío Salim y su muñeco Don Rufino; había otros programas infantiles en los que participaban un payaso y un pájaro, aunque sin éxito. Recuerdo que en los programas colaboraba la Sra. Rocha. Es bonito recordar un episodio del programa donde supuestamente se fueron a Marte, utilizando la magia de la televisión con el Croma Key para trasladar ‘hasta ese planeta’ al televidente, sorprendiéndonos a nosotros los efectos logrados con las cámaras y utilerías en la época de los ochentas. En ese tiempo mis compañeros camarógrafos eran unos cuantos, entre ellos recuerdo a Ricardo Muñoz, Amado Marín y Agustín Ventura, siendo los que iniciamos las transmisiones a color cuando el canal 13 lo acababa de adquirir el gobierno del Estado. Gustavo Muñoz era el director y Jorge García el administrador.
Otro recuerdo que está fresco en mí es cuando me mandaban con una cámara y una casetera al parque Kukulcán a grabar el béisbol de los Leones en un casete de 20 minutos. Nos instalamos en la parte alta del parque, detrás del Home, en la sección de preferencia alta, ya que ahí se veía todo el campo y casi no había movimientos de cámara. Seguíamos el juego con la toma abierta. Afortunadamente ningún faul nos cayó. Cuando se llenaba el casete, lo mandaba al canal en moto con un oficial de la Policía y ahí lo transmitían diferido.
Cómo olvidar cuando se coronaron los Leones de Yucatán en 1984. Recuerdo que Juan José Pacho salió una vez a jugar con un spike blanco y otro rojo ya que, según él, era su amuleto de la buena suerte cuando en ese tiempo J.J. jugaba con los Diablos y en ese tiempo disputaban una férrea pelea por clasificar a los playoffs en la zona sur, eliminados los Diablos rojos en cuatro partidos. Los reyes de la selva se coronaron campeones de la liga mexicana en un repleto parque Kukulcán al vencer a los Indios de Ciudad Juárez. Yo estaba de camarógrafo en el mismo lugar con mi cámara, sólo que esta vez se transmitió en vivo. Recuerdo que Amado Marín estaba en la cámara que se instaló en la sección de la primera base, Ricardo Muñoz estaba de camarógrafo en el jardín central, y él daba la toma principal del pitcher y el cátcher. Completaba el staff Juan Herrera asistido por Ariel (el Charrito) en la tercera Base, cerca del dugout de los Leones.
En los noticieros, fui parte del equipo de información con los reporteros Jesús Delgado, Fernando Castro, José Camerino Márquez en los deportes y Aurelio Aguilar (+) como jefe de información, entre otros.
En cierta ocasión hubo un plantón en el Palacio de gobierno en la época de Víctor Cervera, estaba repleto de gente alborotada, inconforme, que protestaba ruidosamente no recuerdo por qué razón. Los reporteros estaban apostados en un balcón del segundo piso del palacio en el Salón de la Historia. Mi compañero reportero me pidió sacar una toma de esa gente y le pedí a Agustín, asistente de cámara en ese tiempo, que me agarrara de los pies y me sujetara bien. Sin medir el peligro, me subí en el pilastrón del balcón y salió una toma perfecta, convincente del momento de tensión que se vivía en esa ocasión. Orgullosamente puedo decir que la imagen de la entrada de promocional del canal con una imagen del Monumento a la Bandera también fue de mi autoría.
Algo memorable, inolvidable y afortunado me sucedió cuando nos accidentamos en la avioneta. Estábamos grabando un video para las granjas avícolas Sanjor. Fue la segunda vez que lo hacíamos ya que en la primera la publicista, una muchacha joven, se estuvo vomitando durante todo el vuelo, iba sentada en la cola de la avioneta y debido al fuerte viento la avioneta se movía mucho; se sentía muy mal, no dejaba de vomitar y creo por eso se equivocó de lugar ya que grabamos unas granjas, pero resultaron ser de la competencia. En esa ocasión mi asistente fue Agustín Ventura, de manera que tuvimos que hacer un segundo vuelo días después, esta vez voló con nosotros el sr. Jorge Dorantes, gerente general de las granjas que nos contrataron. Nos acompañaron el fotógrafo Jorge Erick Martínez, el publicista Armando Cáceres, José -Pimpo- Azcorra, el piloto de la aerolínea Bonanza cuyo nombre no recuerdo y yo.
Ya habíamos terminado de grabar cuando el Sr. Dorantes recordó que había otra granja que no habíamos filmado, pidiéndonos hacerlo. Nos enfilamos hacía allá. Estaba grabando la última toma cuando se suscitó el percance. La llanta del tren de aterrizaje de la avioneta se atoró con el hilo de guarda de las torres altas de la Comisión Federal de Electricidad ocasionando el accidente. Quiso el destino que esta aventura la compartiera con el amigo José Azcorra, ya que Agustín Ventura se reportó enfermo ese día, por eso mandaron a Pimpo conmigo.
Este accidente aéreo, a Dios gracias, fue sin consecuencias fatales, pero sí memorable: ninguno de los que estuvimos en esa avioneta murió, sufriendo solamente heridas menores, ya que a Pimpo se le rompió un labio y sufrió algunos golpes, a mí dos costillas fracturadas y golpes también, pero no tardamos en recuperarnos; el piloto y el fotógrafo recuerdo que estuvieron ingresados en un hospital para su recuperación. Nadie estuvo, que yo recuerde, en peligro de perder la vida; ese día fuimos noticia nacional.
Una de las satisfacciones que tengo de mi paso por el canal 13 fueron las transmisiones que hacíamos los sábados por la noche en un programa para Canal 11 del IPN a nivel nacional que conducía el caballeroso Luis Carbajo, creo fue el primer programa a nivel nacional que se pasaba hasta la madrugada; se llamaba “Buenos días». Ese programa, según sé, fue el pionero de los programas televisivos de entretenimiento nocturno en México.
Otro evento que nunca se me va a olvidar fue la vez que el Lic. Federico Montes de Oca Cáceres -mis respetos para Fede, donde se encuentre- nos comisionó a Marito Helguera, Agustín Ventura y a mí para hacer un documental sobre Felipe Carrillo Puerto. Fue todo un éxito ese documental, hasta felicitaron al Lic. Montes de Oca y al Canal 13 por lo bien hecho que estuvo el trabajo, ya que narramos completa la vida de Felipe carrillo Puerto. Tuvimos la satisfacción de ser felicitados a nivel nacional, al poner en alto el nivel de trabajo que se realizaba en estos proyectos ya que nosotros teníamos sellada la camiseta de Canal 13.
No recuerdo por qué razón me salí del Canal, ni cuántos años trabajé en la Televisora (creo que siete u ocho años). En ese tiempo tenía el lema “El nuevo estilo de hacer Televisión”. Fueron memorables para mí ya que ahí fue donde aprendí muchas cosas que luego me sirvieron en mi siguiente trabajo que, paradójicamente, fue en la Comisión Federal de Electricidad, sin importarme que un cable de la misma empresa se hubiera interpuesto en nuestro vuelo cuando grabábamos las granjas ocasionando aquel “afortunado” accidente. Esta misma empresa paraestatal me jubiló hace algunos años después de prestarle mis servicios durante 27 largos años.
JOSÉ CRUZ ALCOCER