Ian Paice es el único miembro fundador activo hasta nuestros días con Deep Purple, el único que ha estado en todos y cada uno de los 20 discos de estudio, 27 recopilatorios y 31 álbumes en vivo que esta icónica agrupación británica nos ha dejado como legado.
Nació en Nottingham, Inglaterra, el 29 de junio de 1948. De niño aprendió a tocar el violín, siendo su instrumento base, hasta que a los 15 años decidió ser baterista. Cuando transcurría la década de los sesenta comenzó su intensa actividad, trabajando con diversas bandas locales como Georgie & the Rave Ons, The Shindigs, MI 5, Maze, Soul Brothers, Boz y Albert Lee.
Tocando en Hamburgo, llamó la atención del famoso guitarrista de sesión Ritchie Blackmore, quien lo llamó para su proyecto de banda ‘Roundabout’, ingresando con ellos a principios de 1968. Pronto el grupo se transformó en Deep Purple, al reunir a Rod Evans (voz), Jon Lord (teclados) y Nick Simper (bajo), con quienes grabó ‘Shades of Deep Purple’ y ‘Book of Taliesyn’ (1968), más el lanzamiento homónimo del álbum de 1969.
Iniciando los 70s llegaron a Deep Purple Ian Gillan y Roger Glover, con quienes realizaron el Concierto experimental para grupo y orquesta, para después detonar la escena con sus incandescentes actuaciones donde la guitarra fluida de Blackmore, la fabulosa voz de Gillan y la poderosa batería de Paice buscaron derroteros más pesados, dando vida a lo mejor de su discografía con cinco álbumes: ‘In Rock’ de 1970, ‘Fireball’ de 1971, ‘Machine Head’ y ‘Made in Japan’ de 1972, y ‘Who Do We Think We Are’ de 1973. Con esta alineación, la mejor conocida como Mark II, Deep Purple se convirtió en una de las bandas de rock más importantes del mundo,
Las agotadoras giras generaron fricciones internas, y la salida de Gillan y Glover. La inestabilidad propició que entre 1974 y 1976, Paice y Lord fueran los únicos miembros originales, enfrentando numerosos cambios en la alineación, generando cuatro álbumes: ‘Burn’ y ‘Stormbringer’ de 1974, ‘Come Taste the Band’ de 1975, y ‘Made in Europe’ de 1976), antes de la disolución de la banda.
Durante todo ese tiempo, Paice se había dado tiempo para participar en diversos trabajos de sesión, tocando en álbumes de artistas como Velvet Underground, Eddie Hardin, Pete York, Elf y Bobby Harrison, entre otros. Con Purple inactivo de finales de los 70s a principios de los 80s, participó en más proyectos con Maggie Bell, Kirby, Bernie Marsden y Ken Hensley.
Trabajó un breve período en el trío Paice, Ashton & Lord, grabando ‘Malice in Wonderland’ (1977); después aceptó la invitación de David Coverdale para integrarse a Whitesnake para grabar ‘Ready and ‘Willing’ (1980), ‘Come an’ Get It’ (1981) y ‘Saints & Sinners’ (1982). También trabajó con Gary Moore en los discos ‘Corridors of Power’ (1982), ‘Victims of the Future’ (1983), ‘Rockin ‘Every Night’ (1983) y ‘We Want Moore’ (1984).
Paice fue uno de los que más celebró la conformación de la clásica alineación Mark II en 1984. Fue un retorno a lo grande, con el exitoso ‘Perfect Strangers’ y una agotadora gira que les dejó excelentes dividendos económicos. Tras lanzar en 1987 ‘House of the Blue Light’ y ‘Nobody´s Perfect’ (1988), las viejas rencillas salieron de nuevo a la luz, propiciando un nuevo desmembramiento.
Todavía tuvo tiempo en 1989 de colaborar con George Harrison para la banda sonora de ‘Lethal Weapon II’, tocando en algunas canciones creadas por el ex Beatle.
Su retorno a Deep Purple, ahora con Joe Lynn Turner, trajo como resultado ‘Slaves and Masters’ (1990), pero la pobre respuesta de audiencia en la correspondiente gira trajo de retorno a Ian Gillan para celebrar el aniversario 30 de formación con ‘The Battle Rages On’ (1993), el último en contar con Ritchie Blackmore.
Ian Paice siempre mantuvo una mente positiva en el entorno de Deep Purple, por lo que acogió con afecto a Steve Morse, el prestigiado guitarrista ex Dixie Rex con quien grabaron ‘Purpendicular’ (1996) y ‘Abandon’ (1998).
En 1999, Ian volvió a colaborar con otro ex Beatle, esta vez Paul McCartney, para lanzar ‘Run Devil Run’, un álbum y también DVD grabado en vivo en la célebre Caverna donde los ‘Fab Four’ forjaron su leyenda. Imposible no referir que en la guitarra estuvo otro genio llamado David Gilmour.
Un momento triste fue la salida de Jon Lord de Purple en el 2002, amistosamente, propiciando la llegada de Don Airey, con quien han grabado hasta ahora los discos ‘Bananas’ (2003), ‘Rapture of the Deep’ (2005), ‘Now What?!’ (2013) e ‘Infinity’ (2017).
Paice también ha grabado videos instructivos a lo largo de los años, participando incluso en el programa de TV Rock School de los 80 y en 2002.
El maestro ha reflexionado ante el inminente adiós que está en proceso a través de The Long Goodbye Tour, que llegará a la capital de Yucatán en el mes de noviembre. ‘La música es infinita. Una vez que está grabada, está ahí para siempre. Es inmortal. Lamentablemente, los músicos no lo son. Emocionalmente, el retiro es algo muy, muy difícil. He estado involucrado en esto 50 años. Es muy, muy difícil dar la vuelta y decir categóricamente: «Este es el final, terminará ahora. Adiós.» Eso es muy duro. Muchas bandas han dicho: «Esta es la última gira, y cuando termina, se termina» y luego, un año después, todos se aburren y vuelven a salir a la carretera. Preferiríamos no hacerlo de esa manera. Si anunciamos que fue lo último, es lo último. Pero al final de esto, no importa cuánto tarde… si toma 12 meses, está bien, si toma 24 meses, eso es mejor.’
La experiencia de Ian es absoluta, nadie mejor que él puede explicar cómo ha sido la evolución de la música, del rock a través de las décadas. ‘Cuando comenzabas una banda, si tenía suerte, existía durante cinco años. Eso fue un gran éxito. Si atravesabas la década, eso estaba más allá de la comprensión. Sabes, con el paso del tiempo, que siempre habrá algunas bandas que se mantendrán el tiempo suficiente para llegar a estas posiciones. Los [Rolling] Stones son el ejemplo notable: seguro, se toman un tiempo de descanso, pero siguen ahí y deciden hacer los conciertos que quieren hacer, cuando quieren hacerlo. Hemos tenido un desgaste natural a través de causas naturales, perdiendo personas, por lo que algunas de las bandas que fueron magníficas en el día ya no están allí, porque las personas ya no están en el planeta. Es como una selección natural. Unas cuantas bandas quedarán inevitablemente en el rumbo. Es increíble que nosotros fuéramos una de ellas.’
RICARDO PAT