50 años de Fiesta y Fantasía
“Fiesta y Fantasía” superó las expectativas del público asistente, en un espectáculo que logró transmitir la magia, la diversión y los mensajes positivos que han caracterizado la trayectoria del Tío Salim, uno de los animadores infantiles de Yucatán.
El espectáculo, dividido en 4 etapas, tuvo un inicio increíble, con bailarinas chinas, un pequeño artista marcial que tocaba el gong, e incluso un dragón que ‘revoloteó’ por una escenografía que nos remitía a un escenario del Lejano Oriente. Cuando el niño trepó sobre el dragón, los aplausos y exclamaciones de asombro fueron atronadores.
Todo esto sirvió para introducir a un misterioso mago chino quien, tras realizar algunos trucos rápidos, con un pase mágico despareció su máscara para que descubriéramos que no era otro que el Tío Salim. Más aplausos.
El segundo acto estuvo a cargo del payasito Franky, quien con sus canciones y sus marionetas se echó al bolsillo a los presentes, en una rutina que destiló nostalgia pura.
El tercer acto correspondió al Mago Rigel, cosechando aplausos con su dinámico y elegante estilo para crear ilusiones, además de hacer reír a todos con su interacción con un niño invitado al escenario.
El último acto recreó la transmisión en vivo de un programa de televisión, fungiendo don Mario Chacón como flamante maestro de ceremonias (labor que realizó desde el inicio), presentando al Tío Salim, quien a su vez fue saludando a los artistas invitados: Lizbeth Rodríguez, Leticia González, Rosy Medina, Su Lein Cuevas, Emir Herrera, el mago Rigel, el payasito Franky, así como Globito y Bizcochito, estos dos últimos ahijados de Tío Salim, el encargado de darlos a conocer oficialmente.
El Tío Salim cantó “Cuéntales a tus papás”, recomendando a los niños mantener comunicación con sus padres cuando personas extrañas o conocidas traten de hacerles daño.
El Tío Salim fue por don Rufino y cuando apareció con él en escena, nuevamente los aplausos retumbaron en el teatro, siendo en breve acompañadas por las risas y carcajadas por las ocurrencias del eterno compañero del homenajeado.
Juan Ramón Góngora, nuestro coordinador de escena, daba instrucciones a los tramoyistas (perfectamente liderados por Jorge Escalante Sotelo) y también al productor Carlos Vivas Robertos, encargado del sonido. La maestra Lola Tuzlop Fisher ultimaba detalles con Cindy Cabrera, Alix Alcocer y Pablo Rivero para el último número: “La Muñeca Fea”, de Cri Cri, que cantaría Rufino. Utilizando cámara negra, lograron crear la ilusión de objetos volando y bailando alrededor de la protagonista. En cuanto a mí, daba instrucciones a nuestro grupo, integrado por Tania, Hugo y Leo, así como a los invitados que en breve entrarían a escena para darle al homenajeado la sorpresa final.
“Muchas gracias Lety, muchísimas gracias. Esto es algo especial que siempre voy a llevar en el corazón. Muchas gracias,” alcanzó a decir el Tío Salim, visiblemente emocionado al recibir el primero de los tres reconocimientos que le fueron entregados al final de este festejo por sus 50 años de trayectoria como animador infantil.
Rosy Medina Pacheco fue la primera en tomar la palabra, compartiendo un pasaje muy lindo: “En primer lugar, quiero decirles que es un gran honor para mí tener la oportunidad de dar este reconocer en este día especial. Hoy es un día de fiesta para todos nosotros que somos la familia del tío Salim, un día como hoy no ha habido otro en Yucatán. Por primera vez un personaje dedicado a una labor trascendental en favor de los niños es reconocido. 50 años de trayectoria conllevan un montón de trabajo y energía, y sobre todo la satisfacción de trabajar por uno de los valores humanos primordiales la felicidad de los niños. Que nos quede este día como testimonio de que todos llevamos por dentro una magia especial. Hoy la hemos vivido con los diferentes artistas que están aquí. La labor del Tío ha estado siempre acompañada de esta magia. Todos tenemos la capacidad de dar esa importancia en nuestra vida. A los papás, desarrollen talentos, habilidades y todo el genio que sus hijos tienen; niños, aprendan de sus papás, aprendan de los mayores, para que todos conjuntamente podamos llevar a cabo una labor tan bella como el ejemplo que el tío Salim nos ha marcado en Yucatán. Todo mi cariño por siempre para usted”.
Su Lein Cuevas compartió que ella inició de recepcionista en el Canal 13, estando encargada de recibir las llamadas y anotar los comentarios para el programa del Tío Salim, siendo él precisamente quien le hizo la invitación para ser conductora de televisión. Agradeció que fuera una pieza fundamental para su carrera, añadiendo sentirse orgullosa de formar parte de la “Generación Dorada” de Trecevisión: “Tío Salim, tengo mucho respeto y admiración por tu carrera. Para mí es un honor estar aquí, participar en estos 50 años, y qué bendición tan grande. De verdad la emoción me invade y creo que a todos los aquí presentes cuando te vimos en este escenario que nos impone mucho respeto a todos, estar en este gran teatro Armando Manzanero, y qué homenaje tan bonito. Te quiero felicitar porque el tío Salim es esto, precisamente, unión familiar, es esencial. Quién no tiene historias con el Tío Salim, todos esos mensajes positivos y de valores todos los tenemos que agradecer.”
El comandante Jesús Novelo Chan, en nombre del titular de la SPV, el comandante Luis Felpe Saidén Ojeda, dijo que este le pidió entregar este reconocimiento muy importante: “Porque, si alguno de ustedes no lo sabe, el Tío participó durante 30 años con la Secretaría, impartiendo los cursos que acaban de mencionar. A mí me tocó trabajar directamente con él. Muchas felicidades, reciba nuestro gran reconocimiento.”
Al estar indispuesto nuestro director general de Diario del Sureste, don Luis Alvarado Alonzo, me correspondió entregar un reconocimiento, en mi calidad de Director Editorial, destacando que Salim es colaborador y columnista, publicando cada semana. También consideré oportuno decir al público que este hombre noble nos ha respaldado en la entrega de juguetes a los niños de San Antonio Xluch, fue padrino de la primera comunión de decenas de niños de esa colonia, ofreciendo espectáculos en un asilo de huerfanitos (donde laboraba mi madre), sin jamás cobrar un solo peso por sus servicios.
Para cerrar con broche de oro, Salim pidió encender las luces para saludar a su familia, a su esposa, hijos, nietos, parientes, así como a la viuda e hijos del payaso Pepillín (+), que fue un gran amigo, incluso iba a ser su compadre, padrino de su hija Mariana.
Fue un bello espectáculo, realmente mágico y emotivo, que dejó satisfechas a todas las familias que acudieron a desear lo mejor a su ídolo, quien seguramente guardará estos recuerdos en su corazón.
RICARDO PAT