Letras
Juan José Caamal Canul
En el 81 aniversario del natalicio de Pablo Milanés, el pasado 24 de febrero.
Estas palabras fueron escritas cuando falleció Pablo Milanés, en noviembre de 2022. Por supuesto, no podemos ser objetivos. Nos gana la emoción. Triunfan los sentimientos sobre nuestro marchito corazón. La tristeza, sobre todo.
Sin embargo, quedan los recuerdos, como si las cosas acabaran de ocurrir…
El Concierto de su visita en 1989, de la que conservo el recorte del anuncio en el periódico, la otra mitad del boleto y, en la memoria, la letra y los acordes de Proposiciones, el tema del disco del mismo nombre que promocionaba en aquel entonces:
Propongo disfrutar esta jornada
Inquietando tu gusto en dos sentidos
Una palma que bate en tus oídos
Y un cocodrilo verde en tu mirada
En esa ocasión acudí con un libro, que apreciadísimas amistades me obsequiaron, en las manos. Sabiendo como fui y soy, fiel oidor de las canciones de Pablo, ellos lo habían traído como souvenir a su regreso del viaje a la Ciudad de La Habana. Entonces pensé que después de su presentación podría obtener su autógrafo. Obtuve nada.
A su regreso en el 91, Pedro atendió a Pablo porque el primero trabajaba en aquel momento en el aeropuerto “Manuel Crescencio Rejón” y Pablo documentó su pase de abordar en el buró de Mexicana de Aviación. Pedro le extendió una hoja y Pablo le obsequió un disco de vinil, estampando sobre la cubierta una dedicatoria. Pedro habló y Pablo escribió: “Para Juan José, de Pablo Milanés.” El autógrafo de Pablo en esos días en que promocionaba el disco Identidad, que en la portada tiene una obra pictórica de Manuel Mendive.
Enmarqué el disco sobre dos cristales: en una cara el autógrafo de Pablo y en la otra la estampa de la reproducción del cuadro de Mendive que este elaboró en exclusiva para esa obra musical de Pablo. Manuel Mendive, sobra decirlo, es un pintor que da continuidad a la tradición de la reelaboración y reinterpretación del legado afrocubano mediante la pintura no figurativa.
La última vez fue en octubre de 2015, en la Plaza Grande. Fue un día en que lo escuché de nuevo como se deben escuchar las canciones de Pablo, como nunca lo había escuchado: acompañado en ese entonces de un incipiente amor.
Las canciones románticas de Pablo son tiernas, sinceras, significativas. Acordes y palabras que dan el justo y amplio significado a la palabra amor y amar. Palabras que brillan en la noche y te permiten trazar con letras luminosas el futuro inmediato y a largo plazo. Pensar y sentir a la vez que estás amando, que vives para amar, viviendo la experiencia de amar como si fuera el único día, pensando que nunca se acabará el amor.
Escribí para mí unas palabras para recordar siempre la existencia de aquel bello momento. Su poesía y sus canciones enmarcan nuestro paso por la vida y el amor.
Ya Pablo brilla en el firmamento de la eternidad.
Gracias, Pablo.
Propongo que tu voz enamorada
se lance por caminos y veredas
anunciando: Llegó la primavera,
hagan suyo el crisol de esta morada.
Propongo compartir lo que es mi empeño
y el empeño de muchos que se afanan.
Propongo, en fin, tu entrega apasionada
cual si fuera a cumplir mi último sueño.
