Entre Corcheas
XIV
“CONCLUSIONES MUSICALES Y BAILABLES”
ALFONSO HIRAM GARCÍA ACOSTA
El danzón en un baile pausado, rítmico, cadencioso y ordenado, pues se debe de mantener el ritmo de la música en todo momento, además de las pausas que marque la música; la elegancia propia de toda expresión artística, la concordancia de la pareja al ejecutar los pasos y figuras que realiza la pareja.
El danzón se divide en tres partes fundamentales que son: introducción, melodía y una parte alegre llamada montuno.
La introducción no se baila ya que se ejecuta una entrada de la pareja, empezando a tiempo y ritmo el comienzo de la melodía, al término de la melodía se ejecuta una parada o descanso presentándose la pareja hacia el público o la orquesta.
La parte del montuno es la parte alegre y un poco más rápida, da la oportunidad a la pareja de hacer algunas figuras o florituras, pero se debe comenzar y terminar en tiempo y ritmo, siempre se buscará el lucimiento de la dama. La música del danzón está estructurada en cuatro tiempos por compás, como toda la música tropical y en la actualidad se han hecho arreglos en danzón de melodías bonitas y famosas, así como de canciones populares, boleros, tangos, chotis y música de ópera.
Como ejemplo en México citaré a; Luis Alcaraz y su Orquesta, que transportó a ritmo de danzón; “Moraliza”; “Viajera”, “Lily”, “Bonita” y otras más, que tocó en los años cincuenta en Mérida en los Salones del Centro Campechano, La unión y Bancarios, donde las bailé con mis compañeras de estudios universitarios.
Se han utilizado como toda la música para cantarle al amor, al hombre, a los héroes, a lugares, ciudades, hechos y cosas, y como cosa curiosa, el primer danzón que se compuso fue para una montaña y se llamó “A las alturas del Simpson”; por supuesto esto fue en Matanzas, Cuba el 1 de enero de 1879, pero vale la pena repetirlo.
Para bailar el danzón la música esta arreglada de la siguiente manera: se juntan 2 compases para formar un ciclo de baile, entonces tenemos 8 tiempos para hacer un paso o alguna otra evolución en el argot musical se dice que bailamos un 2 por 4.
Los otros bailes como el tango se bailan en 1 por 4, el vals se baila 1 por 3 y el corrido o paso doble 1 por 2. Esta es la razón por la cual no se baila de la misma manera. En el danzón al tener 8 tiempos tenemos el doble de tiempo para hacer algún paso, floritura o evolución propia del danzón. Aunque nos guiamos por los tiempos de la música en realidad bailamos a contratiempo y en ocasiones a tiempo, ya que este baile se presta para el contraste de velocidad, ya que parte de él lo podemos ejecutar de las 3 maneras descritas.
Al bailar, la parte de nuestro cuerpo que más interviene son los pies, en el danzón debemos moverlos al ritmo y al tiempo que la música lo indique; una consideración básica es: en la música tropical, movemos el cuerpo para que se muevan los pies; en el danzón movemos los pies para que se mueva nuestro cuerpo. Si movemos correctamente nuestros pies, nuestro cuerpo se moverá en armonía con la música y al ritmo del danzón.
Para mantener la elegancia de este baile recomiendo que hay que aprender a posicionar el peso del cuerpo en el punto adecuado en el momento adecuado, (si movemos un pie sea derecho o el izquierdo teniendo el peso o parte de éste en el pie que vamos a mover, tendremos que hacer esfuerzo para moverlo y en la mayoría de las ocasiones lo levantamos o arrastramos y al hacer esto todo nuestro cuerpo se moverá de abajo hacia arriba como resultado de esto doblamos demasiado nuestra rodilla dando la impresión que caminamos y no que bailamos, ya que los pasos en el danzón según los cánones debe de ser suave y deslizado.
DANZÓN
Vientos…
Vientos, que en el metal, suenan a colorida memoria,
y en los pasos se transforman en andares de nostalgia.
Bailar…
Bailar mirando hacia dentro,
hacia las tardes y noches perfumadas
que trasladan, sobre los brillos del recuerdo,
a los besos furtivos disfrazados de susurros
de un incendio que dispensa a las alcobas.
Ecos…
Ecos que resuenan en recuerdos
con sabores a playas perfumadas
donde el calor y el bullicio tienen un tiempo
y, su tiempo tiene,
el poema que se pinta en la mirada.
Modas…
Sensualidad vestida de escote desbordado
de silueta prisionera de una tela que se presume escultora,
describiendo ese talle
como trinchera de la mano que se muere del antojo
y que le arrima al alma
todo el fuego que se quema de sabroso.
Soñar…
Suaves pasos que invitan
a la sensualidad del alma,
a un parnaso, que entre ritmos…,
saben a gozo.
¡NADIE NOS QUITA LO BAILAO…!
Fuentes
https://sites.google.com/site/alegriadanzonera/Resources/sobre-el-danzon