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Dos siglos de dramaturgia regional en Yucatán – XXXI

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Teatro

XXXI

 

 

Sara Molina

  

Dignidad maya

Continuación…

ACTO 1º CUADRO 2°

 

Terraza, entrada del Templo. Entre columnas y cortinas se vislumbra profundidad misteriosa. Llega el Cortejo. El REY ZUZUL, ZACNITE, SACERDOTES, VESTALES, GUERREROS, Gente del pueblo.

 

GUERREROS:        El Dios de la Guerra

nos haga triunfar con haz de laureles

honremos su altar.

El lustre de la sangre

la dignidad de raza

nos guíen a luchar por los pueblos

del Mayab.

Loor, Loor, Loor a nuestro Rey

Loor, loor, loor al gran Zuzul

Loor, loor, loor a Zacnité

la nítida princesa, la fúlgida doncella

que es como la aurora cuando nace el sol

 

El REY, padre de ZUZUL, recibiendo al Cortejo en la Terraza del Templo.

 

REY:                       Bienvenida seas tú

rosa de los campos

derrama su aroma

bienvenida seas tú.

La elegida venturosa

mi corazón de padre

te entrego yo.

Tímida torcaza

descansa en tu vuelo.

Aquí hallarás

tu nido de amor

serás el Norte de su alma

por donde quiera

derrames bendición

siendo así para nos

tú la más alta prez y don

bienvenida seas tú

la que guíe su bajel

la que espera con ardor y con alegría.

GUERREROS:        ¡Hénos aquí!

Los del Mayab y del Pensil

los de Chichén, Itzamatul

los que de Uxmal llegamos mil

¡henos aquí! Deseámosles felicidad.

ZUZUL:                   Hija del sol

hermosa y gentil

bella ilusión

divina flor,

a tus pies viviré prosternado

hija del Mayab

a ti te esperamos

ansiosos, ansiosos

Zacnité doncella del Mayab.

GENTE DEL PUEBLO:      (Coro.) Ansiosos, ansiosos

Zacnité doncella del Mayab,

ZUZUL:                   Eres de mi existir mi la aurora

la pura y radiante luz

y es mi senda encantadora

si la ilumina tu amor.

CORO:                    ¡Dicha para ellos!

ZACNITÉ:               ¡Oh! Mi padre amado, vengo a tu presencia

cual ave que llega a tu amable nido

cual la flor que vierte delicada esencia

sobre el césped blando del jardín florido

y al llegar dichosa plena de tu alegría

deja que yo bese con fervor tu mano

deja que mis labios en unción ferviente

bendigan mil veces su nombre y tu nombre

deja que mi pecho lleno de alborozo

vierta los raudales del amor que siento

porque él es Padre, de amoroso dueño

e infunde en mi alma la fe y la ilusión

paladín que vela mi sueño

astro que alumbra mi corazón.

No dudé un instante el llegar a verme

en los fuertes brazos del Dueño y Señor

¡A quien yo le dije: primero la muerte!

Antes que olvidarte o perder tu amor.

CORO DE SACERDOTES:          ¡Dios piadoso! Oh Kú grandioso

protege a los Señores y a tu Grey.

CORO DE GUERREROS: Invoquemos a los manes pidiendo su felicidad.

CORO DEL PUEBLO:       ¡Sean felices!

Vivan los Príncipes. Príncipes amados

en nuestro pueblo, como en nuestro corazón.

ZACNITÉ:               Vayan flores hacia ti

vengan besos para mí

que los poderes divinos

nos den paz y protección

para ti, para mí.

Vengan flores, vengan besos

vayan flores hacia ti

vengan besos, vengan flores

vengan besos para mí.

CORO:                    A los Dioses invoquemos

saludamos prosternados.

ZACNITÉ:               Vengan flores, vengan besos

vayan flores hacia ti.

SACERDOTES:      ¡Oh gran Kú que en verdad infinita es tu bondad

danos paz, danos pan, danos bienes, huya el mal

en el altar de Dios ofrendamos nuestra prez

danos paz, danos pan, danos bienes, huya el mal.

 

Culto misterioso al Sol y a las divinidades. El Cortejo solemne entra a las profundidades del Templo, donde se cumple la iniciación que no se ve, pero se comprende, expresada en la Música. Con el motivo ZUZUL, el Cortejo regresa de la iniciación.

 

CORO DE GUERREROS: El Dios de la Guerra, etc.

 

Fernando Muñoz Castillo

Continuará la próxima semana…

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