para B.
silencio apártate
que se abran los ramajes
las nubes las enredaderas todas
ella apareció y pude ver sus alas
la perdí en el ruido y la desesperación
en esos soles que se elevan globos
sobre la ciudad
la tranquilidad me sofoca
necesito rodar sobre los montes
espinar los pensamientos los muslos
este costillar al que ahora le haces tanta falta
a qué la luz que filtra en el estancado oleaje
este lodazal de la esperanza en que me he perdido
para qué si tus huellas en el horizonte
brillos de la luz la amplia cegadora
que el ruido y la tormenta acallen su nombre
mis párpados no volverán a cerrarse
y para no mirarla dejaré de dormir