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Lawrence Levy narra sus años con Steve Jobs y cómo reinventaron la industria del cine.
Cuando Lawrence Levy se unió a Pixar en 1995, invitado por Steve Jobs, propietario de Pixar, esta era una compañía de software que apenas se mantenía a flote. El autor de este libro narra todo lo que tuvo que llevar a cabo para lograr consolidarla como una de las más importantes empresas del entretenimiento.
Gran parte de la narrativa se centra en la propia relación de Lawrence Levy con Jobs, con quien establece una sincera amistad. El autor asegura que jamás sufrió ninguna mala actitud por parte de Jobs, dejando en claro que de él recibió la fortaleza para que Lawrence estableciera cambios audaces, una total reorganización de las operaciones comerciales. Jobs aún rumiaba coraje tras ser despedido de Apple y buscaba un nuevo éxito mediático, por lo que trabajó codo a codo con Lawrence para que este lograra meter a la compañía a la bolsa de valores.
Un gran acierto de esta obra es la descripción que el autor realiza de Steve Jobs como un individuo curioso y reflexivo que prefería llegar a resoluciones mutuas sobre las decisiones empresariales. Porque, además, en Pixar detestaban a Jobs, a pesar de que este había invertido más de 50 millones de dólares en aquella compañía que prácticamente no tenía ingresos.
El apoyo que Jobs le da a Lawrence es fundamental para lograr no tan solo que los socios y empleados reconocieran su liderazgo, sino que aceptaran que este se convirtiera en el motor del talento creativo sin precedentes de Pixar. Un libro sumamente entretenido, motivante e inspirador, que rescata como parte esencial un importante mensaje: el talento merece ser defendido sobre los intereses, si no fuera así jamás hubiéramos disfrutado de clásicos como ‘Toy Story’, ‘Buscando a Nemo’, ‘Monsters Inc.’, ‘Wall-E’ y tantos otros que cambiaron el rumbo de la animación por computadora.
La labor de Lawrence y Jobs trajo como resultado que Pixar liderara la salida a la bolsa de la compañía y fuera pieza fundamental en su venta por 7,400 millones de dólares a The Walt Disney Company en 2006.
RICARDO PAT
