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¿Cuánto tiempo debe dormir un gato?

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Mascotas

Todos los que hemos tenido un gato en casa hemos admirado su manera de dormir, esto ocurre porque son más activos entre el anochecer y el amanecer, lo que significa que duermen en su mayoría durante el día y se activan alrededor del ocaso. Un gato adulto puede dormir entre 12 y 15 horas diarias, un gato bebé unas 20 horas. En cuanto llene la panza con el desayuno, y al contrario que el resto del mundo, te lo encontrarás durmiendo durante prácticamente todo el día.

Al igual que a nosotros, ellos se ven afectados por las condiciones del clima. Si están en una temperatura baja, los gatos duermen aún más, ya que necesitan ahorrar energía para mantenerse calientitos, por lo que no debe extrañarnos si los encontramos dormidos en nuestra cama, o bajo los rayos del sol, ya que esta es la forma de regular su temperatura corporal. Incluso si tu gatito es exclusivamente de interior, un día de lluvia o frío le hará bostezar y buscar un rincón cómodo para una siesta.

El comportamiento del gato puede variar mucho dependiendo de la raza, la edad, el temperamento y la salud en general. Todo el tiempo que pasa tu gato durmiendo reserva la energía para correr, abalanzarse, escalar y acechar, y muchas veces cazar animalitos o insectos, para llevártelos como premio.

Los felinos son animales cuyos antepasados eran cazadores y sobrevivían por sus excelentes habilidades para atrapar animales. Los gatos tienen en sus genes toda la información de un depredador, lo que significa que están programados para perseguir y cazar, sobre todo por la noche. Los grandes felinos, como los leones, tienen un patrón similar: duermen durante el día y cazan por la noche. A pesar de que han sido domesticados, los gatos caseros todavía conservan esos rasgos salvajes. Incluso cuando están jugando aparecerán ciertos instintos felinos primarios como agazaparse y esconderse, abalanzarse sobre su presa; ahora, ya no tienen que salir a buscar su comida, así que parte de ese tiempo que gastaban en esa actividad instintiva es invertido para dormir.

Si son bebés, con mayor razón los gatitos pequeños duermen tanto: va vinculado a permanecer en un lugar seguro, mientras su mamá sale a cazar, sin peligro a ser capturado por los depredadores. Además, durante el sueño liberan la hormona de crecimiento, por lo que el sueño es más que necesario para su supervivencia.

Algunos gatos pueden ser activos durante la noche más profunda, sobre todo cuando son cachorros. Pero los gatos también son sociables y se saben adaptar muy bien. Esto significa que un gato puede ajustar sus hábitos de sueño con el objetivo de pasar más tiempo con sus seres queridos, es decir, tú. Los gatos también ajustan sus patrones de sueño a sus horarios de alimentación, por lo que un gato de interior duerme más que uno que vaga fuera de casa.

Si tu gato no tiene con qué o con quién jugar, pasará ese tiempo durmiendo. Es importante que gastes algo de tu tiempo en él, dedica un tiempo para jugar y convivir.

Cuando están en celo duermen menos tiempo, ya que dedican parte del día a marcar el territorio, buscar hembras, hacerse notar para los machos, etc. Los gatos necesitan dormir mucho por naturaleza y, aunque sean domésticos y no tengan tanto desgaste de energía, conservan estas características de su origen más salvaje.

Aunque pasen muchas horas del día durmiendo, no lo duermen todo seguido. El sueño del gato suele formarse de pequeñas siestas cortas, incluso de pocos minutos. La mayor parte del tiempo el gato está en un sueño ligero, que va alternando con sueños profundos en los que puede llegar a moverse sus extremidades, los bigotes, etc. Los gatos también tienen cierta actividad cerebral cuando duermen, no exactamente el sueño del humano pero parecido. Es mejor no molestar al gato cuando duerme porque su reacción instintiva será inmediata, y es molesto para el animal.

Los gatos que no son domésticos y deben cazar para alimentarse duermen menos horas para poder dedicar tiempo del día a buscar comida.

Recordemos que los gatos son animales independientes y por lo mismo debemos respetar su horario de siesta proporcionándoles un lugar privado y confortable, lo cual ellos agradecerán.

Dra. Carmen Báez Ruiz

drabaez1@hotmail.es

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