Teatro
Obituario, escrita por Guillermo Schmidhuber, es una obra que fluye a partir de la reunión entre un dramaturgo soberbio, un actor resentido y una despiadada crítica teatral. El director de esta puesta en escena, Juan Ramón Góngora, incansable gestor cultural en Yucatán, dijo a Diario del Sureste que esta es una obra inclasificable: ¿es un emocionante thriller?, ¿una hilarante farsa?, ¿acaso una profunda reflexión filosófica sobre la existencia y el arte?
Juan Ramón Góngora dirige esta espléndida obra de la pluma de uno de los más importantes dramaturgos mexicanos, contando con el gran actor Sergio Cámara, con 49 años de trayectoria artística, encabezando el elenco. En Mérida, la expectativa crece entre los amantes del teatro, pues está corriendo de boca en boca que esta es una ocasión muy peculiar.
El estreno será el sábado 19 de agosto, a las 20:00 horas, en la videosala del Centro Cultural de Mérida Olimpo. En la misma sede habrá otra función el sábado 26 de agosto, y en septiembre otras dos funciones más los sábados 23 y 30 de septiembre, en el mismo horario de las 8 de la noche. Los donativos son de 180 pesos por persona, aunque en preventa están en 150 pesos. Para adquirir sus boletos, pueden marcar al teléfono al 999 216 91 08.
Durante una de las sesiones de ensayo, realizadas en la Casa de la Cultura del Mayab, el también actor, productor y director teatral señaló que “Obituario” nace de la certeza, como artistas del teatro con más de 50 años, que hablar de su condición de decadencia ante las nuevas generaciones es un acto de honestidad y provocación. “No hemos encontrado vehículo más divertido que esta obra de Schmidhuber, quien cumplirá 80 años este otoño, y que nos sigue sorprendiendo como dramaturgo con su enorme vitalidad escénica,” comentó entusiasmado.
“La obra de Guillermo Schmidhuber que presentaremos al público de Mérida es un juego de espejos entre realidad y ficción, al mismo tiempo que hace una reflexión sobre los mecanismos de la creación teatral. Tiene devoción a la filosofía heredada de Pirandello y su fascinación por los personajes con más perfección de vida que los actores (que los seres humanos en general). Esta idea del personaje bien construido la ponemos en tela de juicio ante las nuevas tendencias narcisistas del teatro contemporáneo, donde se desecha la idea del personaje para dar lugar al exhibicionismo de los actores, en aras de una supuesta idea de sinceridad y de verdad,” declaró Juan Ramón, quien también es coordinador de escena de El show de Chupirul y Caramelo, que se transmite semanalmente por Tele Yucatán.
Aprecio ser amigo de Juan Ramón, a quien he seguido en su incansable labor como gestor, un aferrado impulsor de nuevos espacios para presenta teartro en la capital de Yucatán. Como colega promotor, siempre he respetado su convicción, entereza y terquedad para continuar toda la vida en este esfuerzo.
Por ello le pregunté qué lo hace seguir recorriendo los avatares del largo y sinuoso camino de la gestión, a lo cual respondió: “Los motivos que justifican nuestro proyecto son nuestros deseos de ofrecer un espectáculo divertido y reflexivo para todo tipo de público, colaborando con ello a la creación de nuevo público asiduo al teatro, y recuperar el que se perdió durante el tiempo de la pandemia. Otra parte importante es dar a conocer a las nuevas generaciones la obra del dramaturgo Guillermo Schmidhuber, quien ha manifestado su intención de viajar a Mérida para estar presente en el estreno que se llevará a cabo el sábado 19.»
Juan Ramón añadió que estos proyectos además crean una fuente de trabajo digno que dé como resultado una creación artística impecable. “Ahora bien, si me preguntas cuáles son nuestros deseos filosóficos, debidos a los temas de nuestra obra, pues sin duda está fomentar la solidaridad y el respeto entre los individuos de diferentes generaciones. Fomentar la reflexión sobre el sentido de la verdad, lo verdadero, en oposición a lo ficticio, lo aparente y, en última instancia, queremos que la gente disfrute una obra de arte.»
Juan Ramón también comentó que el querido Dr. Guillermo Schmidhuber les manifestó su plan de estar presente el día del estreno; vendrá a nuestra ciudad después de visitar a su hija en Argentina, pues está muy interesado en conocer la propuesta que hacemos de su obra. «Estamos muy emocionados por el inminente encuentro. En lo personal, este montaje lo hago como un modesto homenaje a su gran obra dramática, que le ha pasado lo mismo que a sus contemporáneos, la llamada generación de la Nueva dramaturgia mexicana de fines del siglo pasado: son desconocidos por las nuevas generaciones.«
El autor de “Obituario” es Guillermo Schmidhuber de la Mora; la producción está a cargo de la Compañía Soñar la Noche-Teatro, dirigida por Juan Ramón Góngora Alfaro, con Sergio Cámara como Rudolph Gottlieb, Gabriel Arroyo como Adam Ludmann, y la actuación especial de Gloria Brayero como Julia Serpe. Juan Ramón está a cargo del diseño de escenografía, vestuario e iluminación; la productora ejecutiva y asistente de dirección es Paula Paola Koot; el responsable de audio y segunda asistente de dirección es Abril Gamboa; la responsable de iluminación es Ariadna Loeza; el diseño de imagen publicitaria es de Ricardo Pat Pech, y la fotografía de Ariel López Tejero.
RICARDO PAT
