In Memoriam
(1943 – 2022)
El último día de noviembre de 2022 una estrella más del firmamento musical con el que crecí se apagó para siempre: la bella y talentosa Christine McVie falleció después de una breve dolencia, confortada por su familia, como ojalá todos algún día partamos.
Los que amamos el Rock, incluyendo sus variantes melódicas, apreciamos y disfrutamos el álbum Rumours, de Fleetwood Mac, una obra maestra que fue compuesta y grabada en medio de una gran tensión entre los integrantes del grupo: Stevie Nicks estaba terminando su relación con Lindsey Buckingham, Christine estaba divorciándose de su esposo John, el bajista del grupo, y Mick consolaba a Stevie. Todo lo que vivían, lo que sentían, se reflejó en ese disco.
Con Rumours conocí formalmente a Fleetwood Mac, porque ya había escuchado Rhiannon en la radio (me encantó), aunque desconocía quién la interpretaba. Eran los días de 1980 y mi educación musical a través de mis gurúes Quintal Avilés estaba en su punto más alto.
Similar al arreglo de Lennon y McCartney en el que cada uno cantaba la canción en la que su injerencia había sido mayor, Christine siempre cantó las canciones que componía en el grupo. De ese disco de Rumours, por ejemplo, ella volvió populares You Make Loving Fun y Songbird, sin olvidar que Don’t Stop, que también compuso y fue otro gran éxito, la cantó con Lindsey Buckingham.
Su tono de voz se complementaba muy armoniosamente con el de Stevie y el de Lindsey, pero siempre sus interpretaciones resultaban grandes éxitos de Fleetwood Mac: Everywhere, Little Lies, Say You Love Me, Over My Head, Think About Me, Love In Store, Hold Me, As Long As You Follow, y mi favorita Over & Over, del álbum Tusk, todas demuestran la vena melódica y romántica que fluía en ella.
Como solista, porque lo fue durante el hiato que se tomó de la banda en uno de esos numerosos períodos en que no se toleraban, imposible no apreciar y disfrutar su éxito “Got A Hold On Me”.
Si bien Cronos nunca detiene su marcha, y algún día nos llevará, nunca deja de ser doloroso despedir a una gran artista como Christine.
El consuelo es que esa música que compuso se queda. Aunque Christine McVie hubiera partido, siempre la recordaremos en las canciones y en las numerosas muestras que existen de su arte en la banda a la que le dio todo y con la que se volvió inmortal.
Gracias por tanta música y por tantos recuerdos, Christine. Vuela alto…
S. Alvarado D.
