Letras
Javier Santamaría
–¿Qué me conoces, máscara?
–Sí te conozco.
–Pues sabes mucho entonces.
–¡Yo lo sé todo!
Sé que sueñas despierto
con sueños de oro,
y brotan en tu mente
delirios hondos;
que amas, como en un tiempo,
tiempo remoto,
amaban los sencillos
y los bisoños.
Que no dudas de nadie,
que crees en todo,
y en fin que eres poeta
como tú solo.
Ya ves, amigo mío,
que te conozco.
Dijo, y se fue ligera…
Ven –gritó ansioso –,
y ella, lejos, muy lejos,
ángel radioso
que se esconde entre nubes
de guinda y oro,
me contestó con triste,
doliente tono:
–¡Ah poeta! ¡Imposible!
¿Qué intentas, loco?
¡Yo soy la dicha!… Nunca
verás mi rostro.
El Fígaro. Semanario Festivo. Mérida, año I, núm. 7, 20 de febrero de 1898, p. 7.
[Compilación de José Juan Cervera Fernández]