Remembranza
“ESCRITOR, PRESIDENTE DE LA UNEAC Y MINISTRO DE CULTURA DE CUBA”
ALFONSO HIRAM GARCÍA ACOSTA
Esta columna es sobre una persona de letras, funcionario de la cultura de Cuba, Abel Prieto, sencillo afable gran amigo, sin importar el cargo que prestaba, que dejó una honda huella en mi vida como periodista del Diario del Sureste en el Caribe. Como corresponsal viajero, pude mezclarme en la cultura y deporte cubano guiado por el Lic. en Derecho y Periodismo y hermano masón Humberto Rodríguez Manso, y el Dr. en Música José E. Loyola Fernández, a quienes visité por vez primera en 1990 en la UNEAC, “Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba”. Rodríguez Manso ya ocupa una Columna en el Eterno Oriente, según la filosofía masónica.
Ellos me llevaron a la presidencia de la UNEAC y me presentaron a Abel Prieto, Abelito como ellos le decían, amistad que perduró con los años. Firmamos intercambios culturales entre México y Cuba, Mérida de Yucatán con La Habana y otras provincias cubanas como Guantánamo, Santiago de Cuba, Camagüey, Cienfuegos, Sancti Spíritus, Pinar del Río y otras más. Nos visitaron en Mérida en diferentes ocasiones, al igual que Nicolás Guillén, Primer Presidente de la UNEAC, a quien conocimos en la APEY, Asociación Periodística Estudiantil Yucateca. Conocí a Guillén y posteriormente a la UNEAC desde hace 54 años. Ahora escribo recuerdos de mi vida en Cuba y el Caribe Antillano, con gratos recuerdos.
Abel Prieto Jiménez (Pinar del Río, 11 de noviembre de 1950) es un profesor, cuentista, escritor y político cubano.
Abel se graduó de Letras Hispánicas en la Universidad de La Habana y luego se desempeñó como profesor de literatura. Fue director de Editorial Letras Cubanas y presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, antes de convertirse en ministro. Fue autor de los relatos “Los bitongos y los guapos” (1980) y “Noche de sábado” (1989). En 1999 publicó la novela “El vuelo del gato”.
Abel Prieto sale del Ministerio de Cultura y pasa a ser asesor del presidente de los Consejos de Estado y de ministros, asesor del presidente Raúl Castro. Fue ministro de Cultura desde 1997 y ahora dirige el Fondo de Cultura José Martí.
Con Abel cenamos en el Barrio Chino de Cuba, después de salir ya de noche de su oficina de la UNEAC en 17 y H del Vedado.
Con Abel Prieto se dio una amistad casi inmediata. El Dr. José Loyola era su Vicepresidente en la UNEAC y Rodríguez Manso era el historiador de la UNEAC, asesor de Abel Prieto, secretario de la Fundación Nicolas Guillén de la cual soy representante en México hace 30 años, con sede en Yucatán. Así que tomamos café en muchas ocasiones en su despacho y viajé con él, invitado para la inauguración de los “Jardines de la UNEAC” en Cienfuegos donde estrené mi poema “Canto a Cienfuegos” por mis vivencias en esa ciudad en años anteriores. Cien ejemplares del poema fueron impresos por el Hotel “Jagua” para repartir en ese día especial, y posteriormente en mimeógrafo me obsequió para mi cumpleaños en Cienfuegos una edición de 350 ejemplares, que doné a la Biblioteca Central del Parque Martí, para sus lectores y visitantes.
Viajé con Abel y la concertista Alicia Perea, Directora del Centro de la Música de Cuba, en automóvil a Cienfuegos para dar marcha al Primer Festival dedicado a “Benny” Moré, festival presidido por Jesús Gómez Cairo, director del “Centro de Información y Divulgación de la Música Cubana “Odilio Urfé”. Develamos la estatua del “Benny” en una glorieta de la entrada al municipio de Lajas, lugar de nacimiento de este insigne cantante que conocí en México en los años cuarenta. Presidí un conversatorio sobre “Benny Moré en México” y asistí a tres Festivales Bianuales dedicados a este cantante y compositor que hizo popular el bolero “Cómo Fue” de Ernesto Duarte por su buen timbre y gran popularidad. En esos festivales conocí a varios historiadores musicales de Colombia, Venezuela, Argentina y Chile, en cada ocasión representando a México.
«Una de las cosas que benefician a Latinoamérica es que no han podido derrotarla culturalmente. La maquinaria de manipulación logra que gente muy pobre vote a la ultraderecha contra sus intereses como clase,» lamenta el escritor cubano Abel Prieto, presidente de la Casa de las Américas. ¿Por qué las redes sociales son un arma de doble filo? ¿En qué momento se encuentra América Latina en la batalla contra la colonización cultural? ¿De qué manera la cultura salvó a la nación cubana en los tiempos de la neocolonia?”
Abel, graduado en Letras Hispánicas en la Universidad de La Habana, con una amplia trayectoria como político, escritor, editor y profesor. Inició su vida laboral como maestro de Literatura y Español durante su servicio social en la Filial Universitaria de la entonces Isla de Pinos, profesión que ejerció también en la Universidad de La Habana. Más tarde se inició en el mundo editorial, primero como editor y jefe de redacción de Teoría y Crítica en Letras Cubana, luego fue nombrado director de la Editorial Letras Cubanas. Encabezó el Centro Cultural Juan Marinello; la Dirección Nacional de Literatura, hasta su promoción al cargo de viceministro para atender la esfera del Libro y la Literatura. Presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) y, más tarde, como ministro de Cultura de Cuba, cargo que ocupó hasta el 6 de marzo de 2012, tras ser designado Asesor del presidente de los Consejos de Estado y de ministros.
En 2016, fue designado nuevamente Ministro de Cultura y en el 2019 asume la dirección de Casa de las Américas, responsabilidad que desempeña en la actualidad. Es miembro del Consejo Nacional de la UNEAC y de la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales “En defensa de la Humanidad”, tarea que impulsa desde el 2003.
Resultó electo miembro del Comité Central y del Buró Político, en el IV y el V congresos del PCC. Es diputado desde 1993 e integró el Consejo de Estado. Fue propuesto precandidato como diputado a la ANPP en los plenos de la CTC, CDR, FMC y FEEM.
Este es el literato que conocí y frecuenté en mis múltiples viajes a Cuba. Ya siendo ministro, me recibió en el Salón de Protocolos la escritora Xiomara Villarreal, que habló con el secretario particular de Abel para ver si me podía recibir. Unos 15 minutos después me indicaron que su agenda estaba llena y no me podía atender en su despacho de Ministro de Educación y de la Cultura cubana, pero me indicaron: “A las dos de la tarde le espera en el Malecón en el restaurante 1812, que lleve a sus amigos de siempre.” Así que telefoneé al Dr. José Loyola, a Humberto Rodríguez Manso, y a Eduardo Ramos, los mismos que me acompañaron cuando conocí a este insigne escritor cubano en la UNEAC. Puntuales llegamos a la cita, que se prolongó hasta más de las cinco de la tarde
Fuentes
Abel Prieto – Wikipedia, la enciclopedia libre
http://www.all.cult.cu/catalogo/autor/abel-prieto
https://www.parlamentocubano.gob.cu/abel-enrique-prieto-jimenez-0
