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El Ayuntamiento de Mérida Financia Campañas de Desprestigio
Sabido es que las revistas electrónicas e impresas tienen que vivir de algo: en ocasiones del financiamiento que reciben de parte de familiares, de empresarios, de la venta de espacios publicitarios. También es conocido por todos aquellos que trabajan en estos medios de comunicación que su trabajo debe ser pagado. Historias hay de columnistas a los que el medio de comunicación (periódico, revista, blog de noticias, página de red social) les presta un espacio para sus publicaciones, les advierte que no podrá pagarles, pero que pueden ponerse de acuerdo con alguien de gobierno, con algún diputado, senador, regidor, miembro de algún partido, para hablar bien de su trabajo, o mal del trabajo de los enemigos, y así cobrar con ellos el dinero que puedan cobrar. Y que muchos columnistas, reseñistas, dependiendo de su ética, le ponen un precio a su pluma, tal vez no a todo su pensamiento, pero sí a muchos de sus escritos.
Todos los gobiernos – municipales, estatales, nacionales – de la misma forma invierten en publicidad para poder hacer llegar a la población (ciudadanía) sus logros, planes, proyectos, propuestas, e incluso sus campañas publicitarias. Los gobiernos, para transparentar la inversión de sus recursos, han creado mecanismos administrativos que tienen que ser cumplidos para que se te pague: darte de alta en alguna oficina, presentar tales o cuales papeles, acreditar tu registro federal de contribuyentes (RFC) entre otros, y entonces metes tus facturas, y con el paso de los días, te llega tu dinero vía cheque. Eso es sabido por todos los proveedores de los gobiernos, incluso los medios de comunicación, como muchos artistas que ofrecen talleres, funcionan como maestros de ceremonia, ofrecen sus proyectos culturales, sociales, de toda índole. Ahora bien, nada de esto es ilegal. Sin embargo, siempre es criticable.
¿En qué gasta nuestro dinero el gobierno, en cualquiera de sus administraciones? Los ciudadanos precisamente estamos para pedirle cuentas al gobierno, para exigirle al gobierno. Acá es donde vamos a detenernos un poco, para tratar de entender por qué un medio de comunicación recibe mes a mes recursos económicos que no reciben otros medios de comunicación en Mérida.
En el caso particular del portal “Libertad de Expresión Yucatán”, se observa en el portal del Ayuntamiento de Mérida que en diciembre de 2016 recibió dos cheques por la cantidad de $21,599.20. En noviembre de 2016 recibió dos cheques por $19,998.40. En octubre $9,999.20. En septiembre $10,000.00. En agosto de 2016 recibió $10,000.00. En junio recibió $31,600.00. En mayo $30,000.00. En abril $10,000.00. En marzo $16,820.00. Y en febrero de 2017, justo en el mes que escribo este texto, José Manuel Repetto Menéndez recibió del Ayuntamiento de Mérida dos cheques que amparan $17,998.40. Todos estos cheques suman un total de $178,015.36 pesos que el Ayuntamiento de Mérida le ha pagado al a veces nombrado director, a veces reportero, a veces co-director del portal Libertad de Expresión Yucatán, en esta página http://www.informaciondelonuevo.com/p/acerca-de-nosotros.html. En la liga puede leerse (al menos hasta hoy 24 de febrero a las 11:13 de la mañana): «Libertad de Expresión Yucatán es un portal de noticias locales, nacionales e internacionales creado el 19 de mayo de 2013 en Mérida, Yucatán, bajo la dirección de José Manuel Repetto Menéndez. Ninguna otra persona está facultada para hablar a nombre de este sitio o su director, por lo cual se solicita de la manera más atenta contactar con un servidor de manera directa para cualquier asunto, pues no existe ningún intermediario que nos represente.» (Las negritas son énfasis exclusivamente del «director» del citado medio.)
Los conceptos de pago en las facturas señaladas indican «Servicio y Difusión de Contenido exclusivamente a través de internet, servicio de promoción en redes sociales de las actividades de la noche blanca»; «Promoción de diferentes servicios y obras del Ayuntamiento de Mérida»; «Publicaciones de Interés General a través de internet»; todo lo anterior puede verificarse en el siguiente enlace: http://isla.merida.gob.mx/serviciosinternet/proveedores/PHP-CRBOPROV-WEB.phpx?Proveedor=27830@27830&Periodo=24&sReferencia=
En el rubro de «Publicaciones de Interés General a través de Internet», bueno, pues cabe todo. Quizá es en ese rubro donde quepan las siguientes notas que uno encuentra en la citada página: «El berrinche feminazi de la semana, ahora por un póster promocional de la FILEY.«; o tal vez «La exigencia (sic) de una feminista radical que doblegó a la FILEY » donde se puede leer: «las mismas que odian a los hombres«. Hay otras apreciaciones de tanta claridad que el «director» de dicho medio hace, como la siguiente: «Las feministas pedían sangre«, lo cual ya parece un poco subido de tono, porque no se cita ningún discurso de «las feministas» en el que alguna «pida sangre», como señala reiterativamente José Manuel Repetto Menéndez. Incluso, el citado personaje llega a estos dichos: «No se descarta que la UADY y la FILEY temieran que Peniche y sus amigas feministas aprovecharan sus nexos con el periódico Por Esto!, que publica todos los días el anuncio de su negocio, para lincharlos.«
Declarar que «las feministas» ‘piden sangre’, así como mencionar posibles «linchamientos», son cosas graves que el «director» de Libertad de Expresión Yucatán pone en voz de las personas a las que se refiere sin siquiera poner un solo texto en el que se indique ese tipo de lenguaje. Sin embargo, sí acierta a presentar una captura de pantalla de la red social Facebook en la que se puede leer un nombre – «Sandra Peniche» –, y un texto en letras minúsculas, y luego en mayúsculas, intentando resaltar una solicitud para que retiren una propaganda, y donde se solicita la «inmediata destitución del rector y de quienes tienen a su cargo la Filey». Solicitar una revisión de dicha campaña, solicitar que se actúe en consecuencia no es sinónimo de «pedir sangre», ni de «intentar linchar», como señala en su texto el «director» de Libertad de Expresión Yucatán». El artículo está aquí: http://www.informaciondelonuevo.com/2017/02/la-exijencia-de-una-feminista-radical.html
Lo que es notorio es saber si los $178,015.36 pesos que el Ayuntamiento de Mérida le paga a José Manuel Repetto Menéndez por el concepto de «»Publicaciones de Interés General a través de internet» son para este tipo de «publicaciones» que cotidianamente aparecen en su portal. Es lícito igual preguntarle al Ayuntamiento si cree que los ciudadanos de Mérida están de acuerdo con permitir que el dinero de los impuestos sea utilizado para pagar este tipo de «publicaciones de interés general a través de internet».
Hay que preguntarle a Mauricio Vila Dosal, Claudia del Rosario Canto Mézquita, Maria Dolores Fritz Sierra, Mauricio Díaz Montalvo, Leonardo Román Parra Canto, Rommel Arturo Uribe Capetillo, José Luis Martínez Semerena, Arturo Sabido Góngora, Dafne Celina López Osorio, Rudy Adrián Pacheco Aguilar, María de los Milagros Romero Bastarrachea, Diana Guadalupe Herrera Anduze, Alfonso Seguí Isaac, María Jesús Monjiote Isaac, Tonatiuh Villanueva Cantelpa, Regino Octavio Carrillo Pérez – que forman el Cabildo del Ayuntamiento de Mérida – si ellos están de acuerdo en que los impuestos del pueblo de la ciudad de Mérida se gasten en que un muchacho se la pase haciendo ese tipo de «publicaciones de interés general», pagándole cada mes durante todo el año 2016 y el inicio de 2017. ¿Acaso el Cabildo de Mérida considera que no hay otros medios de comunicación en internet similares a Libertad de Expresión Yucatán? ¿Cuál fue el mecanismo de licitación –si la hubo– para que el Ayuntamiento de Mérida considerara ese medio como el mejor por encima de todos los otros medios que existen en Yucatán que tienen portales noticiosos en la red?
El portal de internet Libertad de Expresión utiliza el dinero que le brinda el Ayuntamiento para ridículas disputas contra sus «enemigos», presentando notas de opinión financiadas como «publicaciones de interés general» contra personajes que al parecer tienen una ideología cercana a partidos políticos opositores del Partido Acción Nacional, partido al que pertenece el hoy alcalde de Mérida, Mauricio Vila Dosal.
En el portal Libertad de Expresión Yucatán se nota el afán por hablar mal de personas cuyas ideas comulgan con los partidos Morena, Partido Humanista, Partido Revolucionario Institucional, Partido del Trabajo, Movimiento Ciudadano, o de grupos como Poder Ciudadano Colectivo 4 de julio; como queda claro en el siguiente enlace: http://www.informaciondelonuevo.com/2016/11/concretamente-quienes-denuncian.html
Como puede leerse en el enlace anterior, una de las personas que se enlistan incluso lo ha demandado por acoso. En el mismo portal, el «director» presume el citatorio que le hicieron llegar y el lector (http://www.informaciondelonuevo.com/2016/09/interponen-y-ventilan-denuncia-frivola.html) se da cuenta de que la mujer que levantó la denuncia la sitúa el mismo director como ex candidata del Partido del Trabajo. Luego entonces, pareciera que el Ayuntamiento le paga para acosar a personalidades de distintos partidos políticos, dado que le entregan cheques para que en su portal se recreen todas esas notas como «publicaciones de interés general».
Una vez que se revisa la información, parece existir cierta conducta sesgada de parte del «director» de Libertad de Expresión Yucatán, quien se beneficia del cobro de cheques mes a mes de parte del Ayuntamiento de Mérida, que para estas fechas continúa siendo administrado por un político de extracción panista. Los cheques que salen a nombre de José Manuel Repetto Menéndez no salen de las oficinas del Partido Acción Nacional, sino de la Tesorería Municipal, es decir, que le pagan con el dinero de todos los ciudadanos para dedicarse a escribir en contra de los que tienen alguna ideología diferente al panismo.
¡Vaya libertad de expresión!
Adán Echeverría
