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Cine
Que el cine esté atravesando por un momento complicado no es ningún secreto, esta crisis comenzó con la llegada de la pandemia es algo que todos tenemos claro. Es por esto que los principales estudios han estado fracasando con sus recientes estrenos, inclusive el género de superhéroes (que lleva dos décadas acaparando el gusto de las audiencias) ha visto una caída en picada; un ejemplo claro de esto es Black Adam, que ni siquiera recuperó el costo de inversión en su primera semana en las pantallas de los Estados Unidos.
Por eso resulta sorprendente que las películas de terror sean de las pocas que siguen siendo rentables. Me refiero tanto a filmes de las principales productoras como de otras más modestas, como el caso de “Terrifier 2”, que sigue acaparando la atención de las audiencias en Norteamérica, donde actualmente se exhibe, pese a las protestas del sector más conservador.
Es una película muy salvaje, gore, brutal, con el payaso Art masacrando gente durante dos horas y media, no apta para personas sensibles, con muertes muy gráficas, con primeros planos que nos permiten ver con todo lujo de detalles las sanguinarias labores del payaso.
Esta película se rodó en 2019 con un modesto presupuesto de 250 mil dólares, pero la llegada de la pandemia retrasó todo, por lo que es hasta ahora que se estrena. De hecho, esta epopeya slasher del realizador Damien Leone originalmente estaba programada para un estreno limitado a un fin de semana en los Estados Unidos partiendo el 6 de octubre; ante la fuerte demanda, sigue exhibiéndose recaudando dinero (sumando más de 5 millones en su tercera semana) y preparando su salto a los cines de Europa y otros países, por lo que sus realizadores deben estar alucinando ante la tremenda respuesta de las audiencias.
Sobresale la protagonista femenina, Sienna Shaw, una chica sexy, independiente, inteligente que se enfrenta al temible villano, interpretada por la guapa Lauren LaVera. Por supuesto, el guion es muy simple, un mero pretexto para retratar el salvajismo que es capaz de generar el perturbado asesino, interpretado por David Howard Thornton, quien hace un excelente papel, interpretando a un payaso capaz de ser divertido a la vez de espeluznante, un ser cruel que se recrea en cada uno de los asesinatos que comete.
El mismísimo Stephen King alabó la película, señalando que el gore presentado en ella le resultó muy satisfactorio, aunque el maestro del género de terror siempre ha sido solidario con las producciones cinematográficas, sea cual fuera su origen.
Sin duda estamos ante un caso insólito, no solo porque pese a su extrema violencia sigue presentándose en cines comerciales y también porque, pese a ser filmada con un financiamiento ultra independiente, experimentó un aumento del 100 por ciento en su ingreso de taquilla el fin de semana pasado. El terror vende y Art el payaso seguramente seguirá activo en futuras secuelas, con la posibilidad de convertirse en el nuevo icono del género, si no es que ya lo es.
RICARDO PAT
