ALFONSO HIRAM GARCÍA ACOSTA
La cuarentena me ha hecho volver a antiguas costumbres que había abandonado, entre ellas tardar más tiempo regando mi jardín, organizar mi biblioteca en forma temática, y también desprenderme de libros que ya no utilizaré por mi disminución visual.
Estoy haciendo una selección de libros para mis amigos y hermanos de Logia: al maestro Alberto Bermejo le he preparado una selección de obras sobre el socialismo, libros sobre Minsk y otros referente a la URSS que visitó, así como algunas obras de los pensadores sociales de esa enclave; para el Dr. Kevin Angulo una caja con revistas sobre medicina, libros históricos sobre la Masonería en Yucatán y otros para su compañera de vida, la Dra. Violeta Azcona, sobre la vida animal; al Maestro Luis Roberto Sánchez Gavito, una gran cantidad de particellas de música cubana, algunos manuscritos originales de José “Pepe” Domínguez, revistas y libros sobre música que serán parte de la biblioteca del Colegio de Músicos de Yucatán; para Jorge Pacheco un lote sobre literatura, poesía, y antologías poéticas de profesionales de las letras; para el Maestro Janitzio Durán cuentos, memorias de la Secundaria 1, novelas y artículos personales, acompañados de libros de mi pluma. Y así hasta llegar a 14 personas a quienes cedo algo de mi colección privada, para disfrute de otras familias que han convivido en este tránsito de vida. Los lotes ya están embolsados esperando el fin del coronavirus 19 en nuestra península yucateca.
Con este preámbulo me permito enviar esta colaboración al Diario del Sureste, con dedicatoria especial a los colegas del Cono Sur de nuestra América: a Hugo Altez Alberti, mi representante en Uruguay, y al Centro Cultural “La Mancha”, quienes están trabajando en la impresión de mi nuevo libro “En la mar, “Diálogo entre poetas”, un recorrido sobre la vida y obra de Alfonsina Storni; a Mario Paoluchi, Cronista vitalicio de la ciudad de Boca en Buenos Aires con quien, junto con Gelasio Luna y Luna (+), y el que escribe terminamos el libro “Dos Latitudes: Argentina-México, Tres poetas en Pulso Azul”; y para la Dama de la Canción, la santiaguera chilena Carmen Prieto, embajadora del Bolero en el festival Internacional “Boleros de Oro”, que preside el Dr. José Loyola Fernández en Cuba. Este artículo lo considero importante, agradeciendo a la redactora de Todomail Ysabel Taberner López esta síntesis de la conferencia del Dr. William Schaffner, para el Cono Sur y para la parte norte de nuestra América.
“Una nueva observación ha llevado a los investigadores a barajar la posibilidad de que el nuevo coronavirus se convierta en una nueva enfermedad estacional como la gripe y otras infecciones respiratorias. Esto se debe a las tendencias médicas observadas en el hemisferio sur, donde COVID-19 ha ido en aumento a medida que países como Australia se acercan al clima frío. En el hemisferio sur, el invierno generalmente comienza alrededor de finales de junio, y las temperaturas ya han comenzado a bajar.
“Si este es el caso, también deberíamos comenzar a observar una disminución en los nuevos casos de Coronavirus hacia fines de la primavera. Desafortunadamente, esto también significa que el virus puede regresar al hemisferio norte una vez más el próximo invierno. ¿Qué significa esto para las personas y el sistema de salud a corto y largo plazo? Discutimos esto en detalle a continuación.
¿Cómo podría el coronavirus volverse estacional?
Cada vez más investigadores independientes están considerando que el virus que causa COVID-19 puede llegar a ser estacional. El Dr. William Schaffner, experto en enfermedades infecciosas, reveló lo siguiente en una declaración a Healthline: «Creemos que este coronavirus probablemente se volverá más prominente durante el invierno en el hemisferio sur… y volverá al hemisferio norte en la próxima temporada de invierno. Nos ocuparemos de la gripe, otros virus respiratorios y el coronavirus”.
“La pregunta es: ¿es esto posible? ¿Podría un nuevo virus aparecer y convertirse en una nueva carga estacional que tenemos que combatir? La respuesta es, trágicamente, «sí», y los historiadores creen que esto ha sucedido antes con un virus más familiar: la influenza. Las primeras grabaciones de la gripe se remontan a 1580.
En comparación con otras enfermedades infecciosas como la sífilis, la tuberculosis y la malaria, que se han encontrado en las momias del antiguo Egipto y se remontan a milenios, la gripe de los cuatro siglos que ha existido no es nada. Los primeros casos del virus de la gripe se han registrado en Asia, y el brote se extendió por toda Europa, África del Norte e incluso las Américas en este momento.
Aunque no sabemos el número exacto de víctimas, este primer virus de la gripe supuestamente mató a 8,000 personas solo en Roma. A medida que el virus se propagó, se convirtió en una recurrencia estacional y una pesadilla que todavía tenemos que combatir cada invierno, con el virus constantemente evolucionando. Algunos años, es leve, y en otros es particularmente devastador, como lo fue con la gripe española en 1918, o el brote de H1N1 de 2009. Por lo tanto, es posible que el nuevo coronavirus se convierta en la nueva y peor versión de la gripe existente a su lado.
Si el nuevo coronavirus se convierte en una nueva infección estacional, todos debemos estar preparados esta vez. Uno de los primeros y principales objetivos de los sistemas de salud en el hemisferio norte es el desarrollo de una vacuna y otros tratamientos para el virus, los cuales ya están en desarrollo en varios laboratorios de todo el mundo. Idealmente, tendríamos una vacuna para el próximo brote estacional, que sería capaz de reducir la gravedad y la propagación del Covid-19.
Sin embargo, esto solo funcionará si el virus no comienza a mutar rápidamente y la cepa prominente la próxima temporada no sea muy diferente. La mutación es una de las principales preocupaciones en este momento, ya que el nuevo coronavirus es un virus de ARN, lo que significa que no tiene ADN y, por lo tanto, es menos estable y podría mutar más rápidamente al igual que la gripe, otro virus de ARN. La buena noticia es que, hasta ahora, los investigadores no han observado mutaciones particularmente rápidas del virus, con 800 cepas diferentes de SARS-CoV-2 secuenciadas en todo el mundo.
Un aspecto positivo de la posible estacionalidad del virus es que muchos países tendrían tiempo de recuperarse del virus durante los meses cálidos. Si ese es el caso, la cantidad de casos nuevos debería comenzar a disminuir en el hemisferio norte en breve. Desafortunadamente, los investigadores no están seguros de cuánto durará este descanso.
¿Qué pasa con el hemisferio sur?
Los investigadores dicen que el hemisferio sur debería prepararse para lo peor a medida que se acerca el invierno. Afortunadamente, dado que estos países se verán afectados mucho más tarde que Asia, Europa y América del Norte, tendrán mucha más información sobre el virus y las formas de contenerlo que los del hemisferio norte. Aprovechar esta abundancia de información disponible tanto para profesionales médicos, estructuras gubernamentales y el público es clave.
En Australia ya estamos observando un endurecimiento de las leyes de recolección masiva y un orden de permanencia en el país, aunque las personas aún pueden ir a trabajar. No se permiten reuniones públicas de más de dos personas desde finales de marzo, lo que parece haber frenado el número de casos nuevos en comparación con un rápido aumento que ya se observó a mediados y finales de marzo (ver tabla a continuación).
Actualmente hay 5.895 casos de coronavirus registrados en Australia, de los cuales hay 46 muertes (aproximadamente el 2% de los pacientes).
Si vives en el hemisferio sur -como mis compañeros de letras-, debes comenzar a participar en prácticas que se sabe que funcionan, como el distanciamiento social. También es crucial cumplir con las reglas de higiene personal y limpieza, como la desinfección de superficies en tu hogar, vehículo, teléfono inteligente y lavado de manos.
Otra cosa importante que puedes hacer es vacunarte contra la gripe a principios de este año, ya que reduce tu probabilidad de contraer la gripe, o contraer la gripe y COVID-19; es crucial para tu salud y la carga de trabajo de las instalaciones médicas en tu área.
El tiempo dirá si las predicciones son verdaderas o no y el SARS-Cov-2 se convertirá en una nueva infección respiratoria estacional. Mientras tanto, nos gustaría instarte a que tengas precaución y cumplas con las regulaciones médicas locales con respecto al virus, sin importar dónde vives.
Hasta la semana entrante.
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